¡Hola!
¿Cómo están? Esperamos que todo esté yendo bien para ustedes. Aquí está nuestro boletín para el mes de julio de 2025. Qué gusto que se animen a seguir leyéndonos y acompañándonos, sea como suscriptores gratuitos o de paga. Como siempre, esta es su casa. 🥰
Si tienen cualquier pregunta o comentario acerca de lo que estamos enviando a sus buzones, ustedes siempre pueden escribirnos. Pueden hacerlo en cualquiera de nuestras redes sociales, respondiendo directamente a este correo o a través las formas de contacto en las páginas de Alberto o Raquel.
Este mes en YouTube
Lo que hemos planeado para el mes de julio de 2025 es lo siguiente:
1° de julio: Book haul de libros madrileños
8 de julio: #Escritura2025 — ¿Una IA puede escribir mejor que tú?
15 de julio: 20 años de Las Historias
22 de julio: Antoine Volodine, un escritor secreto (invitado especial: Iván Salinas)
29 de julio: 100 grandes cuentos
Todos los programas serán a las 21:30 horas, tiempo del centro de México, en nuestro canal de YouTube, donde también está disponible el archivo completo de nuestras transmisiones y videos desde 2015.
Cosas por venir
El 4 y 5 de julio estaremos en la Feria del Libro Infantil y Juvenil de Celaya, Guanajuato, con muchas actividades:
Viernes 4 de julio
10:00 horas — Alberto presenta su libro La saga del Viajero del Tiempo en el Teatro de la Ciudad, acompañado por Ignacio Casas
12:00 horas — Raquel presenta su podcast El corazón de la Vía Láctea en el Teatro de la Ciudad, acompañada por Manuel Rentería
17:00 horas — Raquel presenta su libro El ataque de los zombis en el Foro Jorge Ibargüengoitia, acompañada por Armando Saldaña
18:00 horas — Alberto dará la charla “Los monstruos y el terror” en el Foro Jorge Ibargüengoitia
Sábado 5 de julio
10:00 — Alberto dará la charla “La era de las historias por venir”, sobre ciencia ficción, con Armando Saldaña, en el Teatro de la Ciudad
10:00 — Raquel dará un taller de cuento en el Aula Catalina D’Erzel
12:00 — Alberto presentará su libro Cartas para Lluvia en el Teatro de la Ciudad
Y para más adelante…
No es algo para la agenda de este mes, pero ya lo podemos confirmar: el próximo libro de Alberto será lanzado en Madrid a fines de octubre, y al mes siguiente en México. Se llamará Las máquinas enfermas y será publicado por la editorial Páginas de Espuma, la más importante del cuento contemporáneo en español, que ya ha publicado otros dos libros de Alberto, Los atacantes y Manos de lumbre. Y aquí está la portada:
El libro tendrá nueve cuentos inéditos, todos alrededor del tema de la inteligencia artificial y de los sueños (o pesadillas) que inspira. ¡Estén pendientes!
Qué estamos leyendo
Raquel — Empecé a leer un libro que promete mucho. Se titula Spring, Summer, Asteroid, Bird y es un poco un manual de escritura y otro poco un estudio sobre formas de narrar diferentes a las habituales en Occidente. Creo que es refrescante la idea de que no todo mundo busque historias con conflicto y que haya más formas que ésa de mantener atento al lector. Por ejemplo, pensemos en Las mil y una noches o Mi vecino Totoro, por decir algo. No he leído tanto como para decirles si está súper buenísimo o solo muy bueno, pero sí que tiene desde el inicio conceptos y ejemplos muy atractivos. El libro aún no está traducido al español, lamentablemente. Ah, y su autor es Henry Lien, gringo nacido en Taiwán.
Alberto — Ahora que estuve en Madrid para el Festival Con Acento 2025, hice lo que siempre hago y gasté más de lo planeado comprando libros. (Al menos no cerré la ciudad de Venecia para mi fiesta de bodas o algo parecido.) Encontré muchas cosas muy interesantes, que vamos a mencionar en el programa de hoy, la que estoy leyendo primero es Ciencia ficción capitalista, un ensayo del escritor argentino Michel Nieva. Este libro está subtitulado Cómo los multimillonarios nos salvarán del fin del mundo, pero no es un texto más de adoración a los magnates de la tecnología como Elon Musk o Mark Zuckerberg, sino, por el contrario, una crítica. Examinando sus proyectos y la forma en la que los describen, Nieva explica la influencia que la ciencia ficción como literatura tuvo en ellos, y cómo se apropian de su lenguaje y sus imágenes para maquillar sus acciones más despreciables. Va un solo ejemplo. ¿Recuerdan el “metaverso” de Mark Zuckerberg, el mundo virtual que supuestamente iba a reemplazar a la realidad entera? La palabra la inventó el novelista Neal Stephenson décadas antes, y nombra un espacio digital donde la gente es explotada. La novela donde el término aparece por primera vez se titula Snowcrash.
La película del mes
El año pasado, en algún programa de YouTube, hablamos un poco de Nosferatu (2024) de Robert Eggers, pero esta película tiene literalmente siglos de historia. Aunque su fuente inicial es, desde luego, la novela Drácula de Bram Stoker, publicada en 1897, hay otras tres películas previas con el mismo título: una de 1922, dirigida por F. W. Murnau; otra de 1979, dirigida por Werner Herzog (muy hermosa y extraña), y una de 2023, de David Lee Fisher, que es una remake literal, plano por plano, de la de Murnau, y se financió mediante Kickstarter. (No la hemos visto, pero suponemos que será al menos un homenaje interesante.)
La primera, la de Murnau, es la legendaria y la que hizo posibles todas las posteriores. El director alemán quería hacer, de hecho, una adaptación directa de Drácula, pero no obtuvo los permisos y por lo tanto hizo una versión libre, clandestina, que estuvo a punto de ser confiscada y destruida por órdenes de la viuda de Stoker. Con los años, Nosferatu se volvió un clásico del cine con independencia de la novela, y de allí provienen las versiones posteriores, incluyendo la de Eggers.
Esta nueva versión, que se anunció como inspirada tanto por Drácula como por el argumento de Murnau, utiliza más o menos los mismos personajes de éste, que a su vez se basan en los de Stoker: Bill Skarsgård interpreta al Conde Orlok (sustituto de Drácula); Lily-Rose Depp a Ellen Hutter (sustituta de Mina Harker); Nicholas Hoult a Thomas Hutter (sustituto de Jonathan Harker) y Willem Dafoe al profesor Von Franz (sustituto del profesor Van Helsing), entre otros. Pero lo más interesante de ver es cómo se sitúa la película respecto de la larguísima tradición del cine de vampiros: la hace por completo a un lado.
¿Han notado cómo, en gran cantidad de películas, novelas e historias de todo tipo, los vampiros siempre se dan tiempo para explicar que no son como el conde Drácula, que Bram Stoker estaba equivocado, que sí pueden salir de día, etcétera, etcétera? Esto sucede igual en la serie Crepúsculo que en Entrevista con el vampiro de Anne Rice. Por el contrario, Eggers no menciona a Stoker en absoluto ni pretende poner a su Conde Orlok como una versión más del vampiro de siempre. Aprovechando que su historia está ambientada en Alemania en 1838 (es decir, antes de la publicación de Drácula), Eggers hace que sus personajes humanos dejen muy claro que no saben contra qué o quién están luchando. Más aún, hay indicios de que la criatura es literalmente un muerto viviente, un cadáver animado por un espíritu maligno (en vez de un “infectado” que desea propagar su maldición), y de que no llega a Europa occidental a matar gente, sino a hacer que se cumpla un antiguo pacto: un acuerdo entre seres sobrenaturales que no tiene nada que ver con el resto de la tradición del vampiro como personaje literario. Nos gusta pensar que esta puede ser una forma de renovar incluso las historias y conceptos más gastados: ir a su origen y partir de él en otra dirección, diferente de la que todos conocemos.
Estoy reajustándome al horario mexicano después de haber pasado una semana en Madrid. Ahora mismo, mientras escribo estas palabras, son las 7:00 de la mañana, y estoy despierto desde hace hora y media: creo que es razonable decir que todavía me falta bastante ajuste. Pero saber esto no me pesa, y hay algo más: estoy descubriendo que no tengo desánimo. Quienes tenemos depresión sabemos reconocer cuando estamos en malas condiciones: entre otros signos, ciertos pensamientos negativos, ciertas ideas malas sobre nosotros mismos y lo que nos rodea se pueden presentar en la conciencia con gran facilidad, y pueden parecer, ¿cómo decirlo?, enormemente atrayentes. La mente se va hacia ellas con rapidez y se queda repitiéndolas. Son como caminos transitados, bien conocidos; incluso, caminos seguros, porque ya sabemos a dónde nos van a llevar.
Y hoy los miro, por así decir, y no tengo el menor deseo de recorrerlos. Estoy sentado ante mi escritorio, con la ventana abierta y el gato Chacho mirando hacia afuera. Entra la luz y cantan los pájaros. Este puede llegar a ser un buen día.
Por azares del destino, estoy de vuelta en el fascinante mundo de los apuntes en libretita. Dicho de otro modo, estoy tomando clases, algo que -ñoña que es una- siempre me ha hecho muy feliz.
Las clases son en línea o grabadas, pero fuera de eso yo soy una estudiante a la antigüita y disfruto tomar notas durante la clase y luego pasarlas en limpio. No tengo la letra más bonita ni hago dibujitos, pero sí soy super fan de inventarme tablas, cuadros sinópticos, esquemas y otros caprichos de diseño editorial artesanal. Echo mano de plumas de colores, una regla de 17 centímetros, post-its y estampitas varias.
La sensación de escribir tanto a mano es extraña: cansa, sí, pero también satisface. Me gusta escuchar el ruido mínimo que hace la punta de una pluma de gel de punto ultra fino contra el papel de 80 gramos y me divierte darme cuenta de que sigo usando los mismos signos y abreviaturas que cuando estaba en la secundaria (por ejemplo, en mis apuntes el símbolo ~ significa "mente", y una flechita que apunta a la derecha puede ser "por lo tanto", "es decir" o similares).
Sé que podría pedirle estos resúmenes a algún modelo generativo de lenguaje pero ¿aprendería yo igual? ¿Se me quedaría igual de claro en la memoria lo que escucho, apunto y luego paso en limpio? Y, sobre todo, dado que es algo que disfruto tanto, ¿por qué iba a renunciar a este placer para cedérselo a un autocorrector sobrealimentado?
Y el gato del mes es…
Chacho, que acompañó a Alberto un buen rato durante el amanecer. 🐱
¡Gracias por recibirnos una vez más!
—Alberto y Raquel
Hubiera estado hermoso que te gastaras en libros lo que se gastó en esa ridícula boda
Muchas gracias por compartir un poquito de su día a día.