¡Hola! Les damos la bienvenida a la entrega 33 de los ejercicios de escritura creativa de Alberto. En esta ocasión, la palabra clave que une a los ejercicios es amalgama. Como siempre, les recomendamos hacer un ejercicio al día. Y agradecemos mucho a las personas que se han unido a estas publicaciones como suscriptores de paga.
Lunes
Según el diccionario, una amalgama es “unión o mezcla de cosas de naturaleza contraria o distinta”. Yo encontré una muy curiosa el otro día, cuando una persona me preguntó si había leído el libro 50 sombras de Dorian Gray. Ese libro no existe, por supuesto, y más bien la persona se había confundido, y mezclaba los títulos de otras dos novelas: Cincuenta sombras de Grey de E. L. James y El retrato de Dorian Gray de Oscar Wilde. Ambos títulos “se unen” gracias a una sola sílaba: Grey/Gray, que en castellano se pronuncia igual en ambos casos.
Inventa otras tres amalgamas semejantes de dos títulos que coincidan en una sílaba o una palabra.
Martes
Ahora imagina y redacta, brevemente, los argumentos de los tres libros amalgamados cuyos títulos inventaste ayer. Haz que cada uno mezcle acontecimientos de sus dos libros componentes. Por ejemplo, Las malas de Camila Sosa Villada más El mal de Montano de Enrique Vila-Matas podría dar Las malas de Montano, una novela acerca de un travesti con una obsesión desmedida por la literatura.
Miércoles
Ahora haz una amalgama doble: mezcla dos títulos y mezcla también los nombres de sus dos autores. Es necesario que haya la posibilidad de “unir” al menos uno de los dos pares gracias a una sílaba o una palabra. Por ejemplo, Las malas de Montano (el ejemplo del ejercicio de ayer) viene ya con dos nombres fáciles de combinar: Camila Sosa Villada más Enrique Vila-Matas podría dar Camilo Vila-Sosa, entre otras combinaciones posibles.
Jueves
Ahora haz una amalgama de personajes: que algo en sus nombres se parezca, y que el nombre resultante sea el de un personaje nuevo, que reúna características de sus dos componentes. Por ejemplo, Don Quijote (el de Cervantes) se podría amalgamar con Don Corleone (el de Mario Puzo y Francis Ford Coppola) y dar Don Quileone, un tipo ordinario que se volvió loco por leer demasiadas novelas policiacas y se creyó un jefe de la Mafia. Mientras más conocidos sean tus personajes componentes, mejor.
Viernes
Finalmente, prueba a hacer una amalgama triple: mezcla dos libros, dos nombres de autores y dos protagonistas, y redacta brevemente el argumento resultante. Un ejemplo: La buena suerte de Rosa Montero, historia de un fugitivo misterioso llamado Pablo, se puede amalgamar con La suerte de Barry Lyndon de William Makepeace Thackeray, historia de un arribista –que al final fracasa– llamado Redmond Barry. El resultado podría ser El bueno de Pablo Barry de Rosa M. Thackeray: la historia de un arribista que fracasa y se fuga por razones misteriosas.
¡Hasta la próxima semana!